domingo, 16 de diciembre de 2018

La magia de la Navidad

El viento arroja los grandes copos con fuerza hasta aplastarlos contra el cristal de la ventana.
Me quedo un tiempo largo observando como se deslizan convertidos en aguanieve. Anochece en la aldea y las luces comienzan a encenderse en las casas vecinas. Paseo mi mirada sobre los campos, empiezan a cambiar su color verde por un blanco inmaculado.
Un escalofrío recorre mi espalda y corro a vestir el cálido suéter que cuelga en la silla. Los troncos apilados esperan su turno para crepitar en la chimenea, tomo uno en mi mano al tiempo que me emociona pensar en el generoso árbol que aporta una parte para hacer nuestro invierno más llevadero.
Todo es nuevo y emocionante para mí. La Navidad en el hemisferio norte! mi sueño convertido en realidad.
La aldea del abuelo es hermosa, la casa lleva un tiempo cerrada, pero siempre estuvo esperando que la volvieran a llenar de vida. En silencio, digo a los "otros" habitantes, que esta vez será por largo tiempo.
Regreso a la ventana, un vaho crubre el cristal, paso mi mano con el mismo cuidado y emoción con la que un niño abre un regalo, el gran abeto del jardín se ha cubierto con un suéter blanco. El abuelo lo está observando también...